SCM – Administración de la Cadena de Suministro

Desde tiempos memoriables las empresas e individuos se han ocupado continuamente de las actividades logísticas tales como: movimiento, almacenaje y transformación de materiales en productos funcionales para los consumidores.

La novedad en este campo estriba en que la logística es sólo una parte de un proceso de mayor integración como lo es la Administración de la Cadena de Suministro, la cual unifica actividades individuales de la logística.

Una cadena de suministro involucra todas las actividades relacionadas con el movimiento y transformación de mercancías, desde la extracción de la materia prima hasta su adquisición por parte del usuario final. El objetivo principal de la administración de la cadena de suministro es la de maximizar el valor total generado. Según Sunil Chopra y Peter Meindl «El valor que una cadena de suministro genera es la diferencia entre lo que vale el producto final para el cliente y los costos en que la cadena incurre para cumplir la petición de éste». Además de que la administración de la cadena de suministro añade valor para el cliente, la diferencia con la logística es que todas estas actividades las realiza en forma coordinada, buscando el acotamiento de costos, reducción de los tiempos de entrega y la rentabilidad para sus integrantes.

Una cadena de suministro es dinámica, pues, implica que algunas funciones fluyan hacia adelante y atrás de la cadena, como por ejemplo: la información, los pagos y algunas mercancías, estas últimas, para ser recicladas y devueltas para integrarse de nueva cuenta al mismo ciclo.

Según Robert B Handfiel en su libro: Introduction to Supply Chain Management: «La administración de la cadena de suministro (SCM, por sus siglas en inglés) es la integración de estas actividades mediante mejoramiento de las relaciones de la cadena de suministro para alcanzar una ventaja competitiva sustentable». Para alcanzar esa ventaja competitiva sustentable, lo primero que se debe hacer es una adecuada planeación acerca de las actividades que se llevarán a cabo en cada etapa de la cadena, Implica: pronósticos, almacenamiento, personas o instituciones que se integrarán en los diferentes eslabones, transporte, manejo de materiales y compras.

Los pronósticos son cantidades de productos o servicios que se manejarán a través de la cadena de suministro de conformidad con las estimaciones de la demanda de los usuarios y se deben elaborar en forma conjunta con las instituciones que integrarán los eslabones. Si cada quien elabora sus propias predicciones, lo más probable es que se obtengan intereses y criterios diferentes que afectarán el desarrollo de la cadena de suministro. La importancia de los pronósticos estriba en que es el instrumento que permitirá la planeación de las demás actividades, pues, es el que ofrece la estadística para el control de las demás áreas incluyendo las repercusiones sobre el precio final de un producto.

En el almacenamiento se tomará en consideración la ubicación del almacén, así como todo lo referente a la adecuada administración de los inventarios con sus respectivos códigos de barras, RFID; la administración de los espacios cúbicos ya que es muy importante para el abatimiento de costo. Es de vital importancia la programación de compras, ya que impacta los niveles de inventario, el acomodo, la ubicación y arreglo de los bienes dentro del almacén.

En lo referente a las personas o instituciones que integrarán la cadena de suministro, es necesario primero establecer las funciones que se requieren que ejerzan de conformidad con lo planeado para la cadena de suministro, y después, verificar su disponibilidad y establecer mediciones y control para la posterior adecuación que permitan un verdadero ajuste estratégico. Las funciones inherentes a la administración de materiales supone el suministro constante de insumos y materiales de alta calidad mediante estrategias que permitan el abatimiento de los costos y el incremento de la calidad de estos bienes.

Otro de los factores que se podrían considerar en la planeación, sería el de fabricar en lugares que posean las ventajas comparativas para producir ciertos productos a bajo costo. Una empresa puede ubicar algunas de sus actividades de manufactura donde las condiciones económicas, políticas y culturales sean adecuadas para el desarrollo de las actividades empresariales y con eso aumentar el margen de ganancias para cada uno de los eslabones que componen la cadena.

Con el incremento de las ventas de mercancías, los clientes exigen cada vez, mejoras en los tiempos de entrega, costos y en los desempeños de los productos que reciben. El problema está en que estos requerimientos deben ir acompañados del mismo precio que solían pagar años antes, lo cual hace difícil la tarea de suplir la misma demanda con mayores valores agregados. Este enorme crecimiento en las nuevas demandas de los clientes evidencia una presión adicional sobre la cadena de suministro que debe ofrecer más con tal de subsistir en un mercado violentado por los bajos precios generados por la alta competitividad.

En estos últimos años la competencia basada en el tiempo y precio es cada vez más importante. Cuando la demanda del consumidor tiende a grande cambios imposibles de predecir, la empresa con mayor adaptabilidad en estos factores tendrá la ventaja. Por ello es imperante el diseño, planeación y puesta en marcha de la cadena de suministro en forma integrada y ello implica la participación consensuada de cada uno de sus miembros para perseguir objetivos en común.

~ por ivaxn en 18 septiembre, 2010.

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